Ver a Tom Cruise hablar de sus próximos proyectos sin que Misión Imposible sea el centro gravitacional resulta casi liberador. El actor quiere seguir haciendo películas hasta que tenga 100 años, pero tras décadas colgado de aviones, parece que la saga Misión Imposible ha quedado aparcada. Al menos, de momento. Y no solo porque esté agotado de romperse huesos: hay en él una necesidad palpable de reconectar con su faceta más camaleónica.
Desde Barry Seal, todo han sido explosiones y vértigo, pero Cruise fue, durante años, el actor más ecléctico de Hollywood, intercalando humor, música y fantasía a partes iguales. Algo le está pidiendo volver a ese terreno. Y, curiosamente, la vía podría ser Les Grossman.
Tom Cruise prepara el regreso al cine de su personaje más polémico y memorable: lo interpretó en el momento más oscuro de su carrera
Para entender por qué este personaje grotesco vuelve a sonar, hay que viajar a 2005. Fue entonces cuando Cruise, en plena promoción de La guerra de los mundos, saltó sobre el sofá de Oprah declarando su amor por Katie Holmes. Fue un momento viral cuando lo viral aún era nuevo. El daño fue inmediato: pasó de estrella intocable a caricatura pública.
En Hollywood dejaron de cogerle el teléfono. Se llegó a plantear matar a Ethan Hunt y pasar el testigo a Jeremy Renner. Hoy suena absurdo. Entonces era el día a día. La respuesta de Cruise fue tan arriesgada como lúcida: decidió parodiarse. Y así nació Les Grossman, el productor de Tropic Thunder, calvo, obeso y despreciable. Una sátira total de la industria y de sí mismo. Lejos de enterrarlo más, el personaje lo redimió. Puso la primera piedra del regreso.
Desde entonces, Cruise ha reconstruido su imagen con quirúrgica precisión. Se ha alejado de escándalos, ha alimentado su leyenda de loco del cine y ha cultivado una narrativa de estrella comprometida con el espectáculo. Y ahora, con The Studio triunfando -muchos la consideran la mejor serie del año- y Christopher McQuarrie, su director fetiche, insinuando que Grossman podría volver, el ciclo parece cerrarse.
"Las conversaciones que hemos tenido sobre Les Grosman son la hostia de divertidas. Hablamos sobre él, tenemos conversaciones muy serias sobre ello, y cómo sería mejor hacerlo. Al final todo se basa en qué es ese personaje", le ha contado McQuarrie al podcast Happy Sad Confused.
Eso sí, no conviene emocionarse demasiado. Cruise tiene sobre la mesa más proyectos que tiempo vital: Top Gun 3, Al filo del mañana 2, una cinta espacial con SpaceX y su reciente colaboración con Iñárritu. El regreso de Grossman, si ocurre, será una sorpresa, no un anuncio inminente.
