Un estudio desarrollado por la Cátedra Fundación Affinity de la Universitat Autònoma de Barcelona ha demostrado que las Terapias Asistidas con Animales (TAA), concretamente con perros, producen mejoras significativas en la conducta y el bienestar emocional de adolescentes tutelados.
La investigación se enmarca dentro del programa Buddies, impulsado por la Fundación Affinity, y ha contado con la participación de 67 jóvenes de entre 12 y 17 años residentes en 12 Centros Residenciales de Acción Educativa (CRAE) de Cataluña.
El objetivo del programa es fomentar competencias emocionales, sociales y de autocontrol a través de sesiones semanales de educación canina que complementan el apoyo educativo y psicológico habitual en estos centros. Durante 14 semanas, 45 adolescentes participaron en una intervención con perros, mientras que un grupo de control recibió las mismas horas de acompañamiento, pero sin interacción animal.
Los adolescentes tutelados se comportan mejor si hay perros
Los resultados son claros: el grupo que trabajó con los perros mostró una mejoría estadísticamente significativa en su conducta general respecto al grupo de control. Según los investigadores, las áreas más reforzadas fueron la empatía, la responsabilidad, la capacidad de solicitar ayuda, la autoestima y el control de la impulsividad.
“Se trata de chicos y chicas que han vivido experiencias muy duras, y estos programas permiten desarrollar vínculos positivos que les ayudan a gestionar mejor sus emociones”, explicó Georgina Oliva, directora de la Dirección General de Atención a la Infancia y la Adolescencia (DGAIA). Por su parte, Maribel Vila, responsable del área de terapias de la Fundación Affinity, destacó la importancia de “la creación de vínculos seguros entre los adolescentes y los perros”, y cómo estos contribuyen a que los jóvenes se sientan escuchados, valorados y acompañados.
