1. Vandal Random
  2. Noticias
  3. Es una de las mejores películas de Ridley Scott y ya es hora de reivindicarla tras cumplir 20 años de su estreno en cines

Es una de las mejores películas de Ridley Scott y ya es hora de reivindicarla tras cumplir 20 años de su estreno en cines

'El reino de los cielos' es una de las grandes películas de Ridley Scott pero el público, en su momento, no la reconoció como debería. Ahora se gana el estatus de cinta de culto.
Es una de las mejores películas de Ridley Scott y ya es hora de reivindicarla tras cumplir 20 años de su estreno en cines
·
Actualizado: 12:40 10/5/2025
el reino de los cielos
historia
ridley scott

En 2005, Ridley Scott era una figura venerada en Hollywood. Tras reinventar el cine épico con Gladiator (2000), ganador del Óscar a mejor película, y consolidar su regreso al primer plano con Black Hawk Derribado (2001), el director británico emprendió uno de sus proyectos más ambiciosos: El Reino de los Cielos (Kingdom of Heaven).

Una producción monumental que prometía revivir el esplendor del peplum histórico y reflexionar sobre la convivencia religiosa en tiempos de guerra. Veinte años después, El Reino de los Cielos merece ser reivindicada como una de las grandes obras de Scott, no solo por su belleza visual, sino por su visión madura y humanista.

Veinte años después de su estreno, esta joya de Ridley Scott merece ser reivindicada como una de sus mejores películas

Desde sus primeras fases, El Reino de los Cielos fue concebido como una superproducción clásica, en la tradición de Lawrence de Arabia o El Cid. Scott y su equipo reconstruyeron enormes sets en Marruecos, incluyendo una Jerusalén medieval a escala real, y movilizaron miles de extras para recrear las batallas. La atención al detalle fue obsesiva: trajes, armas, arquitectura e incluso las lenguas habladas respetaban un notable rigor histórico para una película de estudio.

El reino de los cielos de Ridley Scott

Ridley Scott apostó por filmar con efectos prácticos siempre que fue posible, empleando la luz natural y evitando el abuso de los efectos por ordenador -con ciertos asteriscos esto último, ya que la película está llena de grandes efectos digitales-, lo que dota a El Reino de los Cielos de una textura tangible que pocos filmes modernos igualan. El guion, escrito por William Monahan (quien luego ganaría un Óscar por Infiltrados), se centraba en un héroe improbable: Balian de Ibelin, un herrero francés que, tras perder a su familia, encuentra en Jerusalén un nuevo propósito defendiendo la paz entre musulmanes y cristianos en un mundo al borde del colapso.

PUBLICIDAD

El reino de los cielos de Ridley Scott

Scott eligió a Orlando Bloom como protagonista, apostando por su popularidad tras El Señor de los Anillos y Piratas del Caribe. Bloom entrega aquí una interpretación contenida y serena, muy alejada del carisma arrollador que Hollywood suele exigir a sus líderes de épica. Balian es un personaje lleno de dudas, marcado por la pérdida y la búsqueda de redención. No es el conquistador típico, sino un constructor, un negociador, un hombre que construye un nuevo Jerusalén mientras todo se desmorona.

El reino de los cielos de Ridley Scott

La humanidad callada de Bloom, criticada en su momento, hoy resulta más adecuada que nunca para el retrato de un héroe trágico y fatigado. Es un personaje que está fuera de su entorno y se ve obligado a desempeñar un papel en una guerra más compleja de lo que parece.

Orlando Bloom es el gran protagonista de este peplum colosal al estilo de los clásicos de Hollywood

Uno de los mayores logros de El Reino de los Cielos es su extraordinario reparto secundario. Eva Green, en uno de sus primeros grandes papeles en Hollywood, aporta profundidad y ambigüedad como Sibila, atrapada entre sus deseos personales y su deber político. Edward Norton, oculto bajo una máscara de leproso como el Rey Balduino IV, ofrece una de las actuaciones más memorables de su carrera: un monarca enfermo que lucha desesperadamente por mantener la paz en una ciudad sagrada para tres religiones. Brendan Gleeson, Jeremy Irons y Marton Csokas completan un elenco de altura, encarnando figuras políticas y militares que representan diferentes visiones del poder y la fe.

El reino de los cielos de Ridley Scott

A diferencia de otras epopeyas de aquellos años, como Troya y Alejandro Magno, El Reino de los Cielos es, en esencia, una película muy antibelicista. El mensaje que atraviesa la obra es claro: la verdadera nobleza no reside en la conquista, sino en proteger la vida, en defender la dignidad del adversario. Scott muestra la barbarie en ambos bandos, y convierte a Saladino (interpretado con dignidad serena por Ghassan Massoud) en un modelo de caballerosidad y moderación, en un momento en que Hollywood tendía a retratar a los musulmanes de manera estereotipada.

El montaje que cambió todo: la versión extendida añade una hora de metraje

El fracaso relativo de El Reino de los Cielos, que recaudó unos 218 millones de dólares en taquilla, puede explicarse, en gran medida, por los recortes impuestos por el estudio. Temiendo que el público no soportara una epopeya de tres horas, se eliminó casi una hora de metraje.

El reino de los cielos de Ridley Scott

Esta mutilación destruyó el ritmo y la complejidad de la historia, afectando gravemente a la percepción crítica de la película en 2005. Sin embargo, cuando Ridley Scott lanzó la Director’s Cut en DVD y Blu-ray a finales de ese mismo año, la crítica comenzó a revaluar la película. Roger Ebert, que ya había defendido la versión de cines, afirmó tras ver la edición extendida que era "una de las mejores películas de 2005".

La película contó con un montaje extendido que mejoró el ritmo del film de Scott

La Director’s Cut no solo recupera subtramas esenciales (como el hijo de Sibila y la ilegitimidad de Balian), sino que refuerza el tono sombrío y elegíaco que Scott había concebido. Hoy, El Reino de los Cielos es vista como una obra adelantada a su tiempo.

Su mensaje de coexistencia entre culturas, su crítica a los fanatismos y su defensa de los ideales frente a la corrupción política resuenan aún más en el contexto actual. Además, su estética visual —sus composiciones pictóricas, su tratamiento de la luz, su uso de la arquitectura como marco de conflicto humano— ha influido en toda una generación de directores que buscan devolver al cine histórico su grandeza perdida. Películas como El último duelo del propio Scott, o series como Marco Polo, beben claramente de la huella dejada por esta colosal película que, aún con sus fallos, mereció más suerte. En su 20º aniversario, El Reino de los Cielos merece ser recordada no como un fracaso comercial, sino como una epopeya herida que el tiempo ha sabido curar.

Comentarios: 8

En forosComentar en nuestros foros

Más sobre Cine

RANDOM
Flecha subir
OSZAR »